21 de mayo de 2011

EPÍLOGO

                                                                                            Para L. P.



I


La imagen rebota en el pestañeo
y se desborda
sobre este poema
que no es poema
(dirán mis detractores de impecable calidad literaria)

es el olor a muerte de estos días
tal vez diga en mi defensa
o tal vez intente escribir algo de largo aliento:
trescientos versos donde la imagen estalle en colores hermosos
y en cantos de girasoles

la imagen me abandona
sin embargo
y sigue siendo mayo sobre tu nombre de calor oscuro
y nunca han sido más las once de la mañana
como ahora
cuando desmenuzo el recuerdo malsano de tus voces
entre tragos de agua fría.



II


Ahora eres una salvaje
sentencias
antes de volver a dormir.

16 de mayo de 2011

AYER

Junto al dolor del mundo mi pequeño dolor,
junto a mi arresto colegial la verdadera cárcel de los hombres sin voz,
junto a mi sal de lágrimas
la costra secular que sepultó montañas y oropéndolas,
junto a mi mano desarmada el fuego,
junto a mi fuego el huracán y los fríos derrumbes,
junto a mi sed los niños ahogados
danzando interminablemente sin noches ni estaturas,
junto a mi corazón los duros horizontes
y las flores,
junto a mi miedo el miedo que vencieron los muertos,
junto a mi soledad la vida que recorro,
junto a mi diseminada desesperación que me ofrecen,
los ojos de los que amo
diciendo que me aman.





                                                         
     Roque Dalton
(14/05/35-10/05/75)